Como no es familiar a todos,
el mundo del fútbol no se ha visto
afectado por la crisis en España. Por lo menos los grandes clubes no lo
parecen. La historia de los pequeños y medianos clubes de fútbol es casi de
otro mundo en comparación a la realidad de los monstruos de este mercado.
Actualmente, es común ver a
particulares al borde de perder sus casas siendo desahuciados por deber al
banco unos miles de euros pero nunca
hemos visto a un equipo de fútbol en la misma situación aunque éste deba a los
bancos millones, decenas o, incluso,
cientos de millones de euros. No recuerdo ninguna noticia sobre un club
perdiendo su estadio por desahucio.
Y esto nos lleva a
preguntarnos lo siguiente: ¿acaso los
equipos de fútbol se rigen por otra ley?
Es una vergüenza que las
grandes entidades y empresas no sean las que prediquen con el ejemplo en
tiempos de crisis, cuando su comportamiento debería ser más ejemplar que nunca.
Se mire por donde se mire, solo se llega a una conclusión: si tienes poco dinero y no pagas tus deudas estás perdido, pero si
debes mucho no pasa nada. Esto es extrapolable a famosos cometiendo
crímenes. Un crimen es, también, deber millones y que no haya consecuencias de
ningún tipo.
Pensemos por un momento en
las cifras que se mueven en estos
círculos. Los futbolistas más conocidos, como Messi, Ronaldo o Casillas,
ganan varios millones al año, llegando a cifras tan altas como los 30 millones. Además, tengamos en cuenta
los privilegios de estar en su lugar. Anuncios de televisión, spots
publicitarios, premios, viajes, etc. En total, lo que ganan anualmente es
más que su salario por jugar al fútbol.
Por otra parte, los
entrenadores de más renombre, como Mourinho, ganan menos millones que los
jugadores mejor pagados, pero no es nada desdeñable, tampoco. Pues, en el caso
del luso, el sueldo llega a prácticamente la mitad del jugador mejor pagado,
unos 14 millones al año. Como en el
caso de los jugadores, hay privilegios de ostentar un cargo como éste.
Considerando toda la
plantilla de jugadores que mantienen los equipos más grandes vemos que llegan a
tener más de 20 cada temporada. Es decir, un equipo titular y otro completo de
suplentes. Así, no es de extrañar que se gasten cientos de millones al año en mantener la plantilla y hacer nuevos fichajes.
Pero, ¿cuanto ganan los equipos de fútbol? Las entradas para los
partidos, las ventas de camisetas y otras piezas del equipamiento y otros
servicios para los socios son las principales entradas de dinero para estos
equipos. Sin olvidar las facilidades
fiscales y los prestamos
reiterativos que obtienen de los bancos. Su liquidez es, virtualmente,
infinita.
El resultado: si no se
venden suficientes camisetas se acaba en números rojos. Y esto es lo que sucede
con los principales equipos de fútbol, como el Real Madrid, el Barcelona o el
Atlético de Madrid. Llegado a este punto, me pregunto ¿tan grave sería que
cualquiera de estos equipos no fichase a un nuevo jugador durante uno o dos
años?
¿Qué sentido tiene dar más fondos a una entidad que va a seguir en
deuda? Creo que lo más coherente sería no dar más dinero a alguien que
demuestra que no va a poder pagarlo. Es decir, aquello que nos pasaría a
cualquiera de nosotros si fuésemos al banco con un préstamo anterior aún no
pagado: no habría más dinero.
César P.
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