El pasado sábado el presidente del gobierno compareció ante los medios de comunicación para dar explicaciones sobre el caso de Luis Bárcenas y el dinero negro del Partido Popular. Pretendió ser contundente negando las acusaciones vertidas en torno a su persona y el partido que representa, pero ¿realmente lo fue?
Hay división de opiniones, yo pienso que fue todo lo contundente que se puede ser sin aportar ninguna prueba, aunque, ¿qué pruebas se pueden aportar de algo que no has hecho?
Independientemente de que sea cierto o no que las acusaciones son falsas, hay una cosa que me llamó la atención de lo que dijo, y es que hay una clara campaña de acoso y derribo contra él y su partido desde que ganaron las elecciones.
Está claro que desde algunos sectores de la Sociedad se ha criticado sistemáticamente todas y cada una de las medidas adoptadas por el actual gobierno de España, pero de confirmarse la falsedad de los documentos contables publicados en algunos medios de comunicación, estaríamos ante el mayor complot de la historia de la Democracia en nuestro país. Algo así como un 23F sin disparos. De ser verdaderos, deberían condenar a los implicados no solamente por corruptos, sino además por tontos; ¿Dónde se ha visto llevar tal control de un dinero no declarado? ¿Y encima permitir que se filtre a la prensa?
Confío en que todo se aclare y el PP pueda seguir gobernando, ya que a pesar de no gustarnos algunos de los medios empleados, estoy seguro de que se conseguirá el objetivo de salvar un país que encontró totalmente quebrado. Hoy 7 de febrero de 2013, me aventuro a pronosticar que, salvo atentado terrorista sospechosamente oportuno, en las Elecciones Generales de 2015, el Partido Popular renovará su mayoría absoluta.
Rubén.
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