Recientemente, en Granollers, Barcelona, las autoridades han
detenido a un ciberdelincuente holandés llamado Sven Olaf Kamphuis. Este sujeto
es un activista de 35 años que se considera responsable del mayor ciberataque DDOS de todos los tiempos.
Es decir, se considera que llevo a cabo la denegación de servicios (de Internet)
de forma distribuida. Dicho ataque fue tan grande que llegó a colapsar la Red,
aunque parezca algo imposible de llevar a cabo.
Por lo tanto, este sujeto cuenta con amplios conocimientos
informáticos para invadir redes y llevar a cabo las fechorías que le vienen en
gana. Si bien no resulta un peligro para nadie si venía a ser una especie de acosador online de los usuarios de internet.
Hablamos de un criminal buscado internacionalmente, pues las
primeras pesquisas sobre su paradero empezaron en su país natal, Holanda. En
marzo de este año hubo una serie de ataque contra una empresa que se dedica a
combatir el spam. Estos ataques afectaron a Estados Unidos y al Reino Unido,
por lo que no pasaron precisamente desapercibidos.
Lo que intentaba Sven era hacerse con el control de los
servidores afectados y llegó a colapsar la Red mundial en dicho ataque ya que
el proceso DDOS sobrecarga los recursos del sistema informático haciendo que la
red se ralentice tras una cantidad de accesos masiva. Esto es, como
consecuencia del ataque la Red se ve saturada pues es como si muchísimos usuarios intentasen entrar a Internet al mismo
tiempo.
Está claro que Sven contaba con un arsenal informático de
primer nivel para llevar a cabo sus ataques a gran escala. Aunque nos parezca
difícil de creer, estos ataques a gran escala tuvieron consecuencias a nivel
mundial en internet.
Las autoridades encontraron indicios de que el grupo stophaus era el responsable de estos
ataques. El cabecilla de dicho grupo era Sven, actualmente bajo investigación
por las autoridades tras su detención. Según se sabe, este ciberdelincuente
usaba una furgoneta a modo de oficina informática móvil para desplazarse por
varios lugares de España. La furgoneta estaba equipada con varias antenas para poder
escanear frecuencias.
Además, la casa de Sven se puede describir como un verdadero
búnker informático pues contaba con
varios equipos informáticos y había convertido este lugar en su propio centro
de comunicaciones. Desde allí, había concedido entrevistas a varios medios de
comunicación de todo el mundo hablando sobre los ataques informáticos
realizados.
Desde luego, este profesional de los ataques informáticos
online tenía una forma muy particular de ver el mundo. Tanto así, que vivía, de
alguna forma, dentro de su propia burbuja. Al ser detenido aseguró ser un
diplomático. Se autoproclamó ministro de
telecomunicaciones y asuntos exteriores de la república del Cyberbunker.
Este bunker era su propia casa.
Se encontraron al menos dos ordenadores portátiles y mucha documentación
sobre todas sus fechorías informáticas dentro de su casa. La Brigada de
Investigación Tecnológica (UDEF Central) de la Comisaría General de Policía
Judicial y la Jefatura Superior de Policía de Cataluña han sido los encargados
de echarle el guante a este delincuente informático que estaba entre los más
buscados a nivel internacional.
Países como Holanda, Alemania, Reino Unido y Estados Unidos
han trabajado en conjunto para dar con el paradero de Sven. Sin el esfuerzo de
todas estas naciones no se habría conseguido atrapar a este activista tan
rápidamente. Ahora podemos sentirnos un poco más seguros cada vez que naveguemos
por internet, pero no olvidemos activar el antivirus.
César P.
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