En tiempos de crisis,
como todos tenemos bien sabido, en España se han subido todas las tarifas
posibles. Lo que es peor, es que se han llevado a cabo subidas de precios de
forma sistemática y sin justificación. Algunas subidas pueden tener sentido y
hasta tener lógica, pero hay cosas que se encuentran a precios desorbitados y
no hablamos de ningún lujo que queramos darnos, no, hablamos de servicios de
primera necesidad, como la electricidad en este país.
Mantengo una afirmación
que quiero demostrar a lo largo de este texto, y es la siguiente: el precio de
la electricidad en España se ha elevado como la espuma en los últimos años y,
teniendo en cuenta los recursos de este país, dichas subidas son injustificadas
y resultan un robo a los ciudadanos.
En primer lugar, hablemos
de recursos. España tiene recursos naturales para producir electricidad de
varias formas. Todos conocemos las centrales que generan electricidad quemando
carbón o las presas hidroeléctricas, pero esto no es todo con lo que se cuenta.
Si bien España no es – ni parece que vaya a ser, salvo súbita utopía - una
potencia nuclear, aún queda otro recurso que se puede aprovechar en gran medida
y que es ilimitado: el sol.
Así es, España tiene
ingentes cantidades de horas de luz solar a lo largo del año y hay lugares que gozan
de iluminación prácticamente todos los días. Sin embargo, las energías
renovables están olvidadas en nuestro país por culpa de las grandes empresas
que comercian con combustibles fósiles y derivados. Por este motivo, en España
sale muy caro invertir en renovables, pues tienen un alto impuesto asociado, y
no digamos ya hacer negocio con este tipo de energía.
A mí, personalmente, me
resulta irónico que en Alemania haya tantos paneles solares y en España cuesta
encontrarlos fuera de algunos edificios nuevos. El país germano cuenta con
menos horas de luz solar, por no mencionar que al estar más al norte recibe con
menos intensidad los rayos del sol. Sin embargo, la energía solar es rentable
porque – pese al gasto de mantener las instalaciones – genera electricidad
siempre que haya iluminación del sol. En España se puede generar gran cantidad
de electricidad de esta forma pero no es algo por lo que nadie apueste a día de
hoy.
Por otra parte, el
consumo de electricidad en España ha caído en los últimos años debido al cierre
de tantas empresas y negocios. Sin embargo, el precio de la luz ha subido sin
parar, ¿por qué? ¿Acaso cuesta más generar electricidad para menos personas? En
absoluto. Es más sencillo alimentar una red que consume menos, y, en cualquier
caso, el precio debería de haberse mantenido en vez de subir como la espuma.
Debemos suponer entonces,
si los dirigentes de las compañías eléctricas están en sus cabales, que otro es
el motivo por el cual se ha disparado la tarifa. En efecto, es cosa del
Gobierno en última instancia – pues ninguna subida se puede dar sin su
aprobación. ¿Qué motivos tiene el Gobierno de España para subir la tarifa de la
luz tanto en tan poco tiempo?
Debo suponer que es mero
afán recaudatorio. A costa del contribuyente que ya sufre desde hace tiempo
para llegar a fin de mes pues tiene que afrontar múltiples subidas de precios
mientras que su salario no aumenta – antes más bien disminuye.
Por eso, estimado/a
lector/a, debo concluir que no es ético – en los momentos que corren – subir la
electricidad, ni es una buena medida porque el ciudadano medio ya está con el
cinturón demasiado ajustado. Me surge, además, una pregunta que me gustaría que
Mariano Rajoy respondiera: ¿en qué está gastando todo el dinero que ha
recaudado con las sucesivas subidas de la tarifa de la luz? Espero que sea en
algo bueno para todos…
César P.
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